jueves, 31 de mayo de 2018

LOS SEIS DEDOS DE UNA MANO, poemario, 2018 VV.AA.


LOS SEIS DEDOS DE UNA MANO
Editorial Corona del Sur
Málaga, 2018
(poemario colectivo)
AUTORES:
José Carlos Velázquez
Antonio Gómez
Raimon Blu
J. Ricart
Esteban Maldonado
Alfonso Aguado Ortuño

JOSÉ CARLOS VELÁZQUEZ, pág. 25 (Abordajes y dislexias)

SENTIDOS VERSOS SIN SENTIDO

Todo poema corre el riesgo de carecer de sentido, y no sería nada sin ese riesgo.
Jacques Derrida

A Nicky Negrete

Vientos del norte hilvanando laberintos de barro
en la indómita nación de los versos.
Pálpito de gargantas, derrumbe de hornacinas,
óxido enfermo en la boca de la patria,
victoria de la página que supura
estampidas
de munición gramatical
y flores suicidas.

Y aullará la mar la verdad íntima
de las prisiones.

ANTONIO GÓMEZ, pág. 35 (En este lado de la raya)

V

A mi libro de páginas en blanco
sumo otro poema no escrito todavía,
un poema que ate lazos,
que arrope con precisas palabras
remedios, consuelos y razones.

En silencio, resignados,
a la espera de muros y paredes
aguardan mis versos mudos.

RAIMON BLU, pág. 61 (Con suma contradicción)

INDULTO

Bendita oblea de plástico,
con suma contradicción
anido y remo en la amnistía
de tu mirada, el colirio
de tus dedos surca las yemas
de mis ojos, me arropa
el punto de cruz que te tinta
indulto para deforestar una selva.

J. RICART, pág. 71 (Biblioteca del príncipe Di Sangro)

POLIGRAFIA
DE SU EMINENCIA EL CARDENAL BEMBO
VENECIA 1564

Derrita el sol las atrevidas alas
que no podrá quitar al pensamiento
la gloria, con caer, de haber subido.
Conde de Villamediana


Ponemos granos de sal en la herida de la página, ámbar transparente de los días pasados. Poco importa que la añoranza sea cierta o aprendida, porque la memoria es la elegía de la ausencia. A partir de cierta edad vivir se convierte en una costumbre, más o menos domesticada. El tiempo resbala por las manos como un pez de invierno y las ideas caen lentas y silenciosas como la alopecia. Las cuerdas de tu laúd están hechas con tripas de un pájaro que ya no vuela.

***                                        ***                                        ***                                       

ESTEBAN MALDONADO, pág 92 (Las sombras de la vigilia)

ASOMADO AL BALCÓN

A mi amigo Enrique Rojas Guzmán

Después de la tormenta
el asfalto brilla como piel de ballena,
y la lluvia ha dejado 
charcos en las calles
-fragmentos de un espejo roto-
donde la luna, cansada y jadeante,
contempla su triste rostro pálido.

(2014)

ALFONSO AGUADO ORTUÑO, pág. 115 (Poemas en escalera)

III

Las escaleras
tienen historias
de subidas y de bajadas,
de peleas, de gritos, caídas,
besos, amores, mujeres de la limpieza,
historias de vendedores de enciclopedias
y seguros, de ladrones, puertas cerradas, de suicidios.
Mis estrofas son escaleras con la historia de mi vida.